Lo prometido es deuda: el anal de Little Caprice
Ayer vimos a Little Caprice en su angelical fragilidad dándose un baño inocente que terminó con espasmos de placer, pero siempre en un tono muy limpio, muy sano, muy natural como todo lo que filma X-Art. Hoy, en cambio, veremos a esta joven checa descender a los abismos del porno tradicional, ese en el que el sexo es mejor cuanto más sucio, que diría Woody Allen. La desfloración anal corre a cargo del gran Pierre Woodman, aunque es uno de sus afortunados acólitos quien la ejecuta. Y menuda ejecución. Gracias a Príncipe.