guerras de almohadas que terminan en polvo
No siempre uno tiene que estar necesariamente cachondo para follar, la mayoría de los mejores polvos surjen por casualidad y de una simple guerra de almohadas puede salir la follada del mes. Recién levantadas y con todo el Domingo disponible para ellas solas, estas dos lesbianas empezaron a juguetear sin ninguna intención de nada y acabaron lamiéndose las rajas de extremo a extremo tanto en horizontal como en vertical, joder, lo que tengo claro es que aún no habían desayunado porque madre mía...