Un castigo anal ejemplar a Amy Brooke
Pese a sus recientes problemas con la justicia, Nacho Vidal es un tipo al que a menudo le gusta encarnar a una fuerza autoritaria e inquebrantable en sus escenas. Personajes que, como su Yo pornográfico, disfrutan colocando en una coctelera placer, dolor y humillación y agitarla hasta que alcanza una masa crítica de lujuria sin freno que a algunos les cuesta soportar sin escandalizarse. Hoy además le acompaña otra figura imponente como es Tory Lane, una auténtica psicópata histérica tan amante de ser empalada por el ano como de someter a otras mujeres a base de agresividad lasciva, en este caso, con la siempre agradecida Amy Brooke. Sodomía iniciática, lo llaman en el ejército.