Excitada sin quitarse la ropa
La rubia no necesita despelotarse por completo para calentarse, metiéndose el tanga por la raja del coño mientras se acaricia todo el cuerpo, liberándolo de la ropa para poder machacarse con total libertad. Los pezones de la guarra se erizan cuando nota la humedad de su coño con un dedo, atreviéndose con dos, lamiéndolos con gusto...