Obediente mexicana se come toda la polla
El tĂo le ordena a la mexicana que le chupe la polla, y sus deseos se hacen realidad nada más acabar la frase, metiĂ©ndose la zorra la polla en la boca, chupándola entera mientras pajea el duro rabo. Mientras Ă©l se masturba, la furcia le chupa los huevos para no perder el tiempo, esperando con la boca abierta que le regale su leche.