Sexualidad grotesca, por Brendan Danielsson
Residente en Atlanta, Brendan Danielsson sabía que volvería al arte en algún momento de su vida. Había fracasado profesionalmente en sus inicios, y tras siete años alejado de su vocación, un día se sorprendió dibujando a su jefa de la forma más desagradable e insultante que fue capaz, y así volvió el Brendan ilustrador. Su arte (que, por cierto, recuerda un poco al del gran Albert Bertolín) se basa en retratos que reflejan con detalle la fealdad de personajes estereotípicos o de algo tan tratado como el cuerpo femenino. Vello púbico, cortes, pústulas, deformidades y decadencia física son los ladrillos con los que este peculiar autor construye su obra dedicada a lo grotesco.