un dia de boda inolvidable
Ni los novios, ni sus amigos, ni nosotros olvidaremos jamás este día de boda tan especial, una boda improvisada y genuina de las que hacen historia y no se vuelven a repetir. Mientas los comensales comían, reían y bebían, la pareja hizo una escapada al campo que había detrás de la casa donde se hacía la celabración para echar el típico casquete morboso para estrenar su nueva situación de casados, pero se encontraron con dos de sus mejores amigos y la novia tuvo un antojo (posiblemente porque ya estaba preñada) y su recién estrenado marido no se lo pudo negar...