Nikki Sexx, otra MILF que no deberĂa serlo
La Ăşltima vez que vimos a Nikki Sexx fue entre las fauces de Mandingo, que le clavaba su Moby Dick negra con las habituales dificultades geomĂ©tricas que suelen acompañarle. Hoy las circunstancias son distintas: es el tocĂłlogo pornĂłgrafo Mike Adriano quien fuerza y hurga en los recovecos de una mujer que ha sido vĂctima del clásico sambenito de las MILF, ese que le cuelgan a señoras de caderas amplias, generoso busto y el cutis un poco jodido. Nikki lleva cuatro años en el negocio y desde el segundo lleva esta etiqueta. Flagrante, si tenemos en cuenta que solo ha cumplido 29 y que, como verĂ©is ahora, la tipa está más fresca que una lechuga.