¿que tal tu hija?, bien, se ha echado noviete
Para los que somos un tanto retorcidos de mente, tan solo una frase corta nos es suficiente para hacernos una película del copón y os aseguro que no sale nada bueno... Veamos un ejemplo, una persona normal y corriente se encuentra por la calle con la madre de una antigua compañera de clase y le pregunta; ¿qué tal tu hija?, a lo que la señora le contesta, pues muy bien y muy feliz porque se ha echado un noviete formal... Bien, lo normal sería que el chico pensase: joer que alegría, espero que le vaya bien con él y sean felices porque era una buena chica ¿no?... Qué queréis que os diga, a mi me dice la vieja que se ha echado "novio formal" y lo primero que pienso es: que cabrón, les estará dejando el ojete como un queso de Gruyer, puto defecto profesional...:P