su primer trabajo como señorita de compañia
Si tu primer dĂa de trabajo ya es duro de por sĂ, imaginaos por un momento lo que debe ser llegar a casa de un viejo, ponerte de rodillas, bajarle los pantalones, los calzoncillos y empezar a chupar su polla peluda tenga el sabor que tenga, sin duda para ser una señorita de compañĂa hay que tener las cosas muy claras y muy poco estĂłmago porque no veas lo que se tienen que tragar algunas de estas chicas... Luego todo es ponerse porque supongo que se lo tomarán sencillamente como trabajo y en el mejor de los casos aprovecharán para disfrutar el polvo de una u otra forma, no olvidĂ©is que la mente es poderosa y tiene la capacidad de convertir lo asqueroso en algo agradable, de hecho esta milf empezĂł con cara de asco y terminĂł corriĂ©ndose a chorros, sacando la lengua y chupándose los dedos llenos de lefa mientras que el abuelo salĂa por patas hasta los huevos ya de follar con ella.