montando el numerito cada vez que folla
Desde que a su mujer le dio por retomar su afición por la danza no hay día que no monte el numerito cuando van a follar, la de tonterías que tenemos que tragar con tal de echar un polvo con la parienta, pero así es la vida, ellas aguantan nuestras manías que no son pocas y una cosa compensa a la otra. Tras unos bailes, unas mamadas y una penetración fugaz porque su marido ya no aguantaba más, todo el requesón ha ido a parar a su boca y digo requesón porque lo que expulsa por la polla éste hombre no es normal, puagggggggg.